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jueves, 8 de marzo de 2012

Harold Norse: William Carlos Williams.

Harold Norse (1916-2009)


 












Te quiero agradecer
      por la acacia rosada
      y por la mula blanca
                        por el afilado
escalpelo
       que cinceló
              poesía  memorable

esos versos plateados habrán de brillar
como lo hace
la luna llena en octubre
a través
             de árboles infinitos

                     vos arrancaste
                     un  jazzeado canto nativo
                     del vientre
                             de América

que debe ser escuchado
como una rocola
        pasando canciones populares
no
no podemos olvidarnos
                 de tu sonido

te quiero agradecer
por estar vivo
a pesar de que estás muerto y enterrado
donde las aguas del Passaic
atraviesan parques
y los basurales de Jersey –¡tu
territorio! gracias
por cantar acerca de las agencias
           de autos usados
y del quebrado cerebro
que dice ‘la verdad sobre nosotros’
tus serenos dedos quirúrgicos cortan
a través de la formal mierda literaria
etiquetada   AU TÉNTICA
                   PUREZA AMERICANA

te veo  en la puerta
en Rutherford
tomándome de los hombros
dándome la bienvenida, los ojos encendidos
mientras nos sentamos y hablamos
            hasta que la luz desaparece
retorcés tus manos
            y golpeás el suelo con tu pie
como un caballo de carrera
             en las gateras
                  oliendo la muerte

marcás los pasos  relinchás   sos un potrillo
increíblemente joven    tu voz estridente
agitada
                 jesúúús que higiénico
y limpio genio habita tu angustia!!!!!!!!
 la vejez
                  la enfermedad
                      la negra tierra
           en tu garganta

pero esa flor de tiernos verdes
tu asfódelo
        todavía florece

Gracias por nuestra famosa fiesta en el jardín
en la parte de atrás de tu casa con las rosas

nos sentamos escuchando una mezcladora de cemento
        la radio a todo volumen
  en el local que venden rezagos militares

la apropiada medida de esa
lengua que nunca te agobió
      -No es Inglés- sí el llano
             idioma norteamericano
que amaste
tanto como los basurales
y la mujeres inmigrantes
de tu paisaje
                          “yo
habré de experimentar hasta la muerte”


¿en qué cielos
experimentarás ahora?
¿estará el asfódelo
meciéndose en la brisa
            en los desarmaderos
de automóviles de DIOS?
               ruedas
de carroza herrumbradas
abandonadas
               y quizás
atoradas por el polvo


me pregunto
los coros angélicos
cantan en ¿metro de pie variable?


                                                                                  Atenas, 1964


Harold Norse (1916-2009) Poeta. Entre 1951 y 1970 recorrió el mundo. Al regresar a los EEU se instaló a pocas cuadras de la casa de  su amigo Charles Bukowski en Venice, CA. Sus últimos años de vida los pasó en la ciudad de San Francisco.
Williams y Ginsberg lo leían atentamente y sostenían que su voz, en lo concerniente a tono y eufonía, coincidía con la del pueblo norteamericano.
Lawrence Ferlinghetti en una entrevista contestó: “¿Qué querés que te diga de Harold Norse?  Léelo!!!!!. En Latinoamérica y particularmente en la Argentina, los prejuicios de los más jóvenes y los poetas formados en la universidad, lo han condenado al ostracismo. César Fernández Moreno, que en los 70 lo leyó en París, comprendió las jugadas lingüísticas y sintácticas de Norse.