Pablo Queralt |
1
el azar es una arquitectura
sin color
un knock a la quijada
que arroja su luna con sus
casitas lúteas sus cuerpos
sus cielos escarbados oís
hervir sus aguas
partir el pan
ahí quedaste colgado
atrapado en su crujido
en su luz pétrea en el
arrullo
de los rayos de su mundo
que abren universos
o no llevan a ninguna parte
cierro los ojos leo su
escritura
vamos arrimando el bochin
estoy acá en su huella
pintado en su pared
colocando el agua para
beber
el primer lenguaje del día.
2
Se derrite la ciudad como un chupetín
continuo como siempre
hasta donde mis sentidos llegan
tan oscuro este mundo de lo bueno y lo malo a
través de su
sangre
esta entrando en mí
donde ellos ven el pique de la pelota
nosotros vemos belleza
la suela que avanza sobre su cielo bufandas
al viento
me gusta caminar en medio de la noche de cama
en cama
siguiendo
ese ruidito suave sigiloso que la muerte
busca
dar un paso más en su profundidad
cerrar una ventana mear sacarme el sueño
y despertar en un eco de lo que el miedo
destruye
la vergüenza es mi camino
murmuro mi deseo
esas son mis alas.
3
Emulsionados embriagados en ese exceso de
amor bombeados
por su sangre pisando nubes en el día
amarillo latiendo nuestra
propia vida
que encuentra su luz de estrógenos y
testosterona
formas que se me escapan de las fotos que
guardé y ya no son
nada como olas que salpican las nubes en esa
baranda me
siento a mirar donde comencé a ser un
extraño.
4
En ese aire de ir hasta el puente para sentir
pasar los autos
bajos los pies
su murmullo que golpea para que la muerte sea
lejana como
un viento borrando el tiempo el amarillo que
dibuja su retirada
y alza la alegría
de olvido solo para mirar lo que veo
5
Como la piedra que baja al fondo del río sigo
desenrollando ese
susurro este tiempo que alguien me dio
volviendo a la vida en
el borde trémulo
de la nube a estas puertas en su horizonte
infinito con mis
ruinas vivas borrando huellas antes de pasar
mi otra persona
su viejo reloj su cuerpo lleno de silencio y
agua jugando con su
corazón sin pensamiento.
6
Juntamos moneditas para ir a ver a los artistas
con sus cuerpos
que al terminar de usarse se dejan en su otra luz en otra
resurrección estoque
de donde todo surge y el cielo y el infierno
desaparecen y es un
momento deslizándose en este planeta con sus
viejas fotos que
adoramos en blanco y negro y las palabras que
no se pueden
olvidar dejadas en los oídos como sueños abandonados en el
fondo del placard cambiando de ropas encontrando su lugar al
salir somos otros distintos
a los que éramos.
Pablo Queralt. Poeta. Es curador de poesía de la
biblioteca de san Isidro, colaborador del suplemento cultural del diario El
pregón de Jujuy y diario Punto Uno de salta.
Publico varios
libros de poesía entre ellos el padre, late, perfume animal, coca, crack,
jazz. cocineros ser y ser visto.
Sus poemas
figuran en algunas antologías como 7 poetas salta bs as y poesia de bs as ed
hombre nuevo.
(Nota
bibliográfica enviada por el autor)