domingo, 27 de febrero de 2022

Luis Pereira: Poemas

 

Luis Pereira



 


 


















SZYMBORSKA PARRA MARGARIT
Paladas de tierra arena escombros bosques
minerales
Capas y capas de
vegetación
Es lo que queda
El sonido del verso de
Ajmatova
Alumbramientos
"Agradezco haber estado ahí en el 17".
"Conocerte fue una maravilla".
"Fuimos felices en el 83".
Capas y capas de escritura
Tabernas
Calles intrincadas
Quebradizas
Riachos
Afluentes de riachos
Cuencas
El poema de Circe
Agradecer

LA MARCA DEL CASTELLANO POLUÍDO
La raspa de lo hablado 
Raspaje 
La melanye 
El Paraná la Pampa Paysandú
Osobuco zaino la baguala
El lenguaje de la fonda la herrería lo manya los vagones 
Conjugar la franja 
tricolores
Rampla
¿Lo que raspa el medio campo? 
¿Los defensas? 
Lo que raspa es el lenguaje 
Marcadores
Las tiras del asado en la parrilla

(ejercicio / arte poética) 

AQUÍ YA SANGRARON LOS PASTIZALES 
los vacunos los bovinos toda la ganadería
aquí las empalizadas las alambradas ocultan el paisaje
aquí la curia ya fue cómplice una y otra vez
y las coreutas y los señores de la comisión local
aquí ya una vez era el sitio de los perfumes caros
de las bufandas envidiables de las togas y atuendos envoltorios de colores vistosos
acá fue el sitio de los endecasílabos de las declamaciones de usanzas arraigadas
látigo emperatrices violadores
aquí ya desaparecieron a Gelós Bleier Omar Paita (1)
aquí declamaron 
aquí ya sangraron el gauchaje los galpones las herrerías
hubo un sitio llamado La Tablada
aquí los doctos los pusilánimes dictaban las reglas
y eran días de desfiles en la municipalidad

(1)Desaparecidos por la dictadura que gobernó Uruguay entre 1973 y 1984.

Luis Pereira Severo (Paso de los Toros, Tacuarembó, 1956) Poeta, gestor cultural, editor y periodista uruguayo.

Como editor de poesía, es coeditor desde 1996 de la colección Civiles iletrados. Formó parte de la redacción de las revistas Nexo (1975), Destabanda (1977-1979), Cuadernos de Granaldea (1980-1983) y Tranvías & Buzones (1987 a 1988). En 1988 integró el grupo literario «Fabla», junto a Víctor Cunha, Elder Silva, Atilio Duncan Pérez («Macunaíma»), Aldo Mazzucchelli, Jorge Luis Hernández, Edgar Sención, Rafael Courtoisie y Eduardo Darnauchans.  

Integra las antologías "La noche amarilla. 33 + 1 voces de la poesía uruguaya actual", Círculo de poesía, 2020, selección Marisa Martínez Pérsico, Nada es igual después de la poesía, cincuenta poetas uruguayos del medio siglo, 1955-2005 (2005) y La confabulación de las arañas, Detodoslosmares, Córdoba, Argentina, 2018.2 Textos suyos forman parte de "Los hijos de Putin", colectivo de varios autores, Cartonerita NiñaBonita, Zaragoza, España, 2018.

Con la primera edición de Poemas para mi novia extranjera, publicada por VOX de Bahía Blanca (Argentina) en 2015, obtuvo el Premio Nacional de Literatura – poesía édita, MEC - en 2017.

En 2018 obtuvo la primera mención en el concurso de poesía Onetti de la Intendencia de Montevideo, con el libro inédito Poemas para leer en una pantalla de 5”.

Ha publicado en poesía: Murallas (1980); Señales para una mujer (1985 - 2ª edición México. 1993); Memoria del mar (1988); Poemas de acción y mujeres delgadísimas (1992);
Retrato de mujer azul (1998); Manual para seducir poetisas ( 2004); Pabellón patrio, serie de relatos íntimos (2009);
Fenómenos de animación bailable, antología personal (2011); Fenómenos de animación bailable, antología personal, e book (Argentina, 2015); Poemas para mi novia extranjera, milonga rioplatense (Argentina. 2015), 2ª y 3ª edicióniones (2018); Poemas para leer en una pantalla de 5 " (2019).



lunes, 21 de febrero de 2022

Charles Bukowski: todas las contingencias y la yegua

 
Charles Bukowski

























todas las contingencias...

le dije entonces en la cama
después de haber volado
toda esa distancia
hasta allí
le dije después en la cama,
“no hay vuelta atrás,
eso lo sabés, sería
terrible...”

y lo fue
a pesar de ello me quedé 2
o 3 días
y luego ella me llevó 
al aeropuerto
el perro estaba en el
asiento trasero
ese perro que había vivido
con nosotros
esos
pocos
años.

me bajé
le dije
“no me acompañes,”
el perro saltaba
sobre el asiento,
comprendió
que me iba,
lo acaricié 
con fuerza
me lamió el rostro.
qué mierda.
me agaché para sacar mi bolso
ella me dio un besito
de despedida,
luego me dirigí
hacia el mostrador
de la aerolínea
 y entregué mi pasaje
de vuelta.
“¿fumador o
no fumador?
me preguntó
la 
empleada.

“bebedores,” le
contesté.

me entregó
mi
pase de abordaje
y caminé
hacia 
la puerta correspondiente
sintiéndome muy
mal.

pues todos
aquellos
a quienes conocía

no sabían

ni 
llegarían
saberlo.


la yegua

“sabés una cosa”
dijo en voz baja

“vos estabas en la barra
y no me podías ver
entre tanta gente
yo bailaba con ese fulano
y bailamos y bailamos
muy juntos
pero no me llevó a su casa
porque sabía
que yo estaba con vos”

“ gracias
un montón
de gracias”
murmuré

ella 
siempre pensaba
en el sexo

lo arrastraba 
de un lado a otro
en una bolsa de papel
como se llevan
las pequeñas cosas
compradas
a último momento

demasiada 
energía

observaba
a cada hombre disponible
atentamente

en los cafés
mientras desayunaba
miraba
o al mediodía
por encima de su plato 
miraba
o a la noche
saboreando su comida
preferida
carne con ensalada
miraba

“mi modelo y ejemplo
es marilín”
confesó cierta noche

“lo único que hace es
ir de discoteca en discoteca
a bailar con esos forros
que ella adora
no entiendo
cómo la aguantaste
tanto tiempo”
me comentó un amigo

en el hipódromo 
desaparecía
y cuando nos encontrábamos
en las ventanillas
me decía  tiernamente
“tres hombres
me invitaron
a tomar algo”

en los estacionamientos
yo levantaba la vista
y la podía ver caminando
con un extraño a su lado

“pero si él caminaba
en mi misma dirección  
al pasar a mi lado 
y continuamos caminando juntos
nada más amor
no deseaba herir sus sentimientos”
razonaba

de día
de noche
en el lugar menos pensado
me recordaba
que yo era un hombre
condenado por sus celos

un 
buen día
ella cayó
en la profundidad
de sus órganos sexuales

des  va ne cién 
do    se 

un gran
reloj despertador
flotando en el abismo
del gran cañón

yo 
escuchaba su eco lejano
sus engranajes

sus campanillas
que no dejaban de sonar
sin embargo
dejé de verlo
de oírlo

ahora 
me siento mucho mejor
estoy aprendiendo a bailar
y me he comprado
un sombrero negro
que uso con el ala quebrada
sobre mi ojo izquierdo

(Versiones Esteban Moore, 1988)




Charles Bukowski (1920-1994) Poeta y narrador, publicó una cincuentena de libros en poesía y prosa,. Le gustaba repetir: “ Como dijo Ezra , hacé tu T-R-A-B-A-J-O. De él  proviene el vigor y el maldito proceso creativo. Sólo así podrás poner baile y música  en tus huesos. Yo tengo que escribir, si me cortaran las manos, tipearía con mis pies. Y sepan nunca he escrito por dinero, lo he hecho sólo para sobrevivir”. En una entrevista, ante las preguntas  de los periodistas sobre el destino y la  vocación, el viejo Hank se limitaba a decir: ” nací para robar rosas en las autopistas de la muerte”












jueves, 17 de febrero de 2022

Álvaro Figueredo: Canto a Bartolomé Hidalgo

 


Álvaro Figueredo




















Donde la dulce patria, sometida,
a curva sin tormento,
es ocasión de trébol, diga el viento
su olor y su medida.

Diga la  luz los tiernos territorios
de menta macerada
con que la tarde asume una jornada
de potros transitorios.

Donde el cordero pacta con el nardo
relámpagos de nieve,
estatuyan la patria azul y breve
la amatista y el cardo.

Donde alza el  sur sus órdenes de espuma,
diga la luz somera
el resplandor del ceibo y la manera
ceremonial del  puma.

Cuaje el maíz piramidal y diga
su ardiente arquitectura,
desde noviembre a marzo, la clausura 
sensata de su espiga.

Donde establece el mármol sus reposos
yacentes de azucena,
diga, en flexibles números, la avena,
sus arcos minuciosos.

Diga su incauta miel la pasionaria
disciplinada y rica,
junto al ombú trascendental que abdica
su fronda planetaria.

Y la torcaz — pizarra y albedrío —
traspase con su anhelo
innumerable,  el cielo, el cielo, el cielo,
fragante y labrantío.



Álvaro Figueredo (Pan de Azúcar, Maldonado; 1907- 1966). Poeta, ensayista y docente. Ha publicado en poesía, entre otros títulos: Desvío de la Estrella (1936); Mundo a la vez (1956). En 2007, la Casa de la Cultura de Pan de Azúcar, con motivo  de la celebración del centenario de su nacimiento publicó un extensa antología de su obra poética.





viernes, 11 de febrero de 2022

Gabriel Di Leone: Poemas

 

Gabriel Di Leone (Foto Martín Carlos Pagola)
















Siempre pensé en las liebres


Mi padre y dos de mis tíos les disparaban 
al atardecer
junto a algunos amigos
:aire de estampidos, exclamaciones, humo; 
desde la loma yo miraba
(no te acerques hasta el final, dijo mi padre).

Tío Manuel había plantado la avena
e hizo la cerca de podas de espinacruz;
las liebres iban descubriendo pequeños huecos 
a medida que crecía el avenal y los hombres 
elegían cuál hueco debía ser cerrado
y cuál no para que llegado el momento 
frente a cada uno hubiera un tirador:

la luna, el viento, no recuerdo 
qué marcaba el día de venir, 
reunirse
disparar de espaldas a la loma 
veinte pasos uno de otro
a contraluz a contraverde
:las liebres corrían a morir saltaban 
a causa de los impactos.
Luego volvíamos caminando a la casa 
bordeando los pozos de la vieja mina 
(no te acerques)
las escopetas dobladas bajo el brazo
colgando las tibias ensangrentadas 
presas por las patas las orejas o metidas 
en una bolsa de arpillera.

Los hombres fumaban y hablaban 
más alto y llegados a la casa
se demoraban a beber 
sentados en el patio 
un vaso de vineta;
las armas en ángulo junto 
a la pared de piedra

(el viento  
del atardecer
en el pelaje de las quietas 
haciendo suaves hoyos)  
el interior
de los cañones era
como las galerías de la mina abandonada 
sólo negro silencio

:me preguntaba
si para las liebres sería 
ahora
también así.


Otro epitafio para el gordo Montiel

Uno no piensa en el orgasmo mientras 
tiene un infarto
:uno se ocupa en 
procurar oxígeno
:está diseñado así 
como aparato de vida

de modo que casi no puedo 
decirte
que ojalá hayas caído 
enfocando el mejor pubis 
entre los médanos
de Chihuahua
que te lleves su foto 
hiperrealista 
clavada
en el roto corazón
:deja que otros digan 
que el alma
es otra cosa.


Cayó Lerena

En el río de cerveza que
pasa por el Carlitos
el arroyo de ron del boliche
marginal, polvo y sobre
resina
el descuido de las cosas,

en la marea de caras
distraídas, caminar
de intensas muchachas
por Sarandí, mujeres,
muslos solares: exclamaciones
en el boliche polvoriento,
admiración en pleno posillo de café
:sonrisa al ángulo marrón
de su saco,

no está
falta
sin aviso no está

(en el atardecer minucioso
de las cosas
a la orilla del río de ron
en las mesas desaprensivas de Campanario
cayó a veces su sonrisa
la gracia imperceptible con que
anduvo
triste mínimo sonriente torpe)

en la marea de las cosas
su minuciosa ausencia
acumula polvo sobre la
simplicidad
conque fueron cantadas

:último bolero en Maldonado
en el pucho del siglo
-cinco quilómetros al norte
de la calle 30-
así que no está
usó de cierta
malignidad
para dejarnos a envejecer
masticar aceptaciones
:no somos ya no somos
jóvenes aquiles
:no se nos invita
a escoger entre
el heroísmo y el olvido
:aquí
los bulldozers se encargan
de la nostalgia

:no está
y
   no está
simplemente somos menos
al atardecer cuando el río
de ron fluye
manso por venas
recónditas
:último bolero: Maldonado mata
y olvida.


Y qué fue del realismo socialista

                                                a Gonzalo Fonseca


hacia Aiguá en la noche
rauda
la camioneta municipal
con los hombres del gobierno progresista

la camioneta municipal
inventa para nos con sus focos
una imagen de ruta
señalizada fosforescente

no logra con ello
librarnos del flanqueo cerril
sólido
espinas y rocas geografía
traducida en serpiente
de asfalto

sabiendo que allá
en su vallezón
Aiguá
nocturna
espera
hablamos y reímos
apoyando los gestos en el mate
Pereira dice que hame visto
por Román Guerra
hablando con Neruda
(está loco/confunde
:era Nicanor Parra
:quizá el acento sea
la explicación)

reímos
:festéjase acercarnos
a una ciudad / en su sitio / centrada
(se está en sí
y los rumbos
no la amenazan)

festéjase tal vez
-sin formulación
alejarse inversa proporcional
mente
de ciudad tanta
des
ubicada
de su plaza caída
menstruando barrios
como hijos no paridos

rumbo a Aiguá
por el túnel del tiempo
(“mire usté: allí la noche
es noche pa´ alivio
y descanso”)

Gonzalo pasa frente
a la granja donde jornaleó
cosechas de frambuesas
(memoria de pinchazos
en la yema de sus dedos
desterrados de la guitarra)
estamos en camino
sí señor

y llegaremos y los vecinos
de la comisión de cultura
alertas en cortés asedio
esperándonos
-listo
su centenario
tablero de ajedrez
diciéndose que ésta
podría ser de verdad
una partida nueva

qué te parece / díceme Pereira / y
yo no sé si pide que
adelante opinión o sigue
hablando
“del verso de Parra
que robó en Román Guerra”
no sé contesto porque no sé

un armonioso caos hacia Aiguá
hermosa la noche
ineclipsable
por vértigo de focos de iodo
:en misión oficial
los poetas
permítense
elogiar
la incertidumbre


Tristeza de esta banda


                                                 Dulce farito del Cabo de Santa María, 
                                                 obelisco suplente, 
                                                 ¡cuántas historias alumbrarás todavía 
                                                  cuando yo sólo
                                                  persista en esta líneas! 
                                                                                         Haroldo Conti

                                                  y aunque la línea está cortada señalando 
                                                  el fin yo sólo digo adiós 
                                                  hasta que nos veamos de nuevo
                                                                                          Bob Dylan

repara viejo Dylan 
mira otra vez
no es, Bob, un sudaca viajando 
en Greyhound
:es Conti en ONDA 
por la Banda Oriental
muy al sur de tu viento 
de respuestas

embalado en una tu balada 
y en ONDA el Conti 
siempre
venía
a visitar nuestro costado 
hermanaba amigaba el Conti
tanto de amor mirando hermanaba 
que manaba
el paisaje de su adentro 
poblado de nosotros

nunca dijo adiós
:no le gustaba decir adiós 
decía
algo como hasta luego

dijo hasta luego
pero no ha aparecido

cántate una, Bob,
de galgos y buses plateados 
nocturnas navajas
en gargantas de ciudades 
soñolientas
una que diga como el Conti 
hasta luego repite
por favor  
aquello de 
vernos de nuevo


Cierta narrativa panfletaria

                                                        (endecapanfleto del 11/11/11)

                                                         A Horacio Verzi, 
                                                         que nos ha endilgado 
                                                         El infinito es sólo una forma de hablar


ves el ángulo saliente de la cubierta 
de hormigón del campus
sobre la pared de ladrillo visto 
suspendido
exento
ves el cielo entre uno y otro

el ladrillo terrestre milenario 
babilónico
el hormigón proclama 
modernidad

modelado esgrimiendo
el desvelo de algún arquitecto 
sepultado en silencio
puesto que las grandes 
letras de acero cromo
gritan Domingo Burgueño Miguel
:el nombre de un hombre 
que destelló su vida
de espaldas a sutilezas tales

el ángulo del campus
visto desde el salón de clase 
vacío ahora
con el caos de los 
bancos cuando se van 
los muchachos
un ventanal cubierto por pesadas cortinas 
(una medio caída te permite ver
el ángulo del campus y algunas ramas 
de la cryptomeria septuagenaria
que dialoga con él pero arrimada 
al liceo también septuagenario)

silencio con traqueteos
de limpiadoras por los pasillos 
sucesor del silencio
donde has dicho 
hace unos momentos 
es bueno reflexionar
sobre la libertad y la justicia 
por ejemplo
hablando de antígona o de jesús 
antígona e ismena y la libertad
y la justicia o el hijo pródigo 
y su  hermano mayor
y la  libertad y la justicia
¿pueden relacionarse 
de algún modo?
¿para qué 
puede servir 
relacionarlos?

no lo sabes
ni el ángulo del campus 
con su hormigón volado
ni la criptomeria sumando horizontes 
durante siete décadas
ni este silencio 
residual

pero
de algún modo todo contiene 
y de algún modo todo consiste 
en la importancia
la gran 
importancia
de que los muchachos lo piensen 
independientemente de los nombres 
en acero cromo
que vayan quedando 
sobre las edificaciones



Gesta de cantar


                                                     (Uno siempre está solo y el heroísmo
                                                       es una cuenta 
                                                       que otros sacan)


pero mi ritmo es la milonga dice el tipo 
y eso que bailoteó años
de bitles y rolins y sicstinvarios

la diferencia entre atado y suelto 
dice el tipo
es infinita te lo digo
yo que estuve atado con alambres 
más dice
suelto suelto nunca anduve 
a no ser cuando era niño 
pero muy niño

(la milonga es un cielo accesible
: busca una simple escalera 
de octosílabos)
dice 
el tipo
de vez en cuando el diablo
deja el mundo en manos de dios 
entonces ocurren las revoluciones

(cosas así y dale con la milonga 
le compadezco: pienso
“con el cantar se consuela”)



Gabriel Di Leone  (Minas, Lavalleja, 1951- Maldonado,  2021)  Poeta, narrador y profesor de Literatura, Residió en Maldonado desde 1982. 
Su obra poética comprende La edad de la indecencia (civiles iletrados, 2018), Incendio Intencional (Mención de Honor poesía inédita IMM 1996, civiles iletrados, 1997) y    27 de Möebius y la Capitana (Mención de Honor poesía édita MEC 1995, Eladio Linacero Editor, 1994).
En 2014 publicó El Rescate de la Bataraza, “relato infantil galponero para mayores”, y en 2015 Pa’ Voltear al Gigante, relato breve, en ambos casos para la editorial Trópico Sur Editor. Participó como antologador y antologado en La Ballena de Papel – Antología de Poesía de Maldonado 1985-2017 (civiles iletrados, 2017). 
Fue prisionero político de la dictadura uruguaya entre 1976 y 1982. La experiencia está recogida en los volúmenes colectivos Escritos de la Cárcel (1985) y Trincheras de papel: dictadura y literatura carcelaria en Uruguay (de Alfredo Alzugarat , 2007).
Entre 2005 y 2015 fue Director de Patrimonio de la Intendencia de Maldonado.





 

  

Figueiredo Agra: poemas de “Os hemisférios loucos”

 



Figueiredo Agra (1936-1982),
























LOS HEMISFERIOS LOCOS

Los hemisferios que explican
me complican.

Esos grandes hemisferios son el concepto del mundo,
representan,
perciben,
sufren
y abstraen el mundo.
Esos grandes hemisferios que todo lo polarizan
me subdividen y me desgobiernan.

Para mí todas las personas
sólo tienen dos pulgadas de tamaño,
pero no se ahogan,
minúsculos marinos que sólo los veo
en el circuito de las arrugas
que se agitan en sus frentes.

Y como no preciso nada
y tanto quiero de mucho,
abdico de ese bote,
del mar calmo
y del gran calado.

Ni la voluntad
-necesidad que pueda y que dure-
de puerto seguro o de playa rasa
que exista porque deba.
No quiero nada y casi en todo
-brújula menor, la ruta sin destierro-
nota cartográfica,
concisión de su anti-música,
mar articulado
e impreciso, pues ya no lo preciso.

Navegante al fondo del océano tan plano;
dejo de lado la plataforma,
lienzo submarino,
sargazo,
lucidez,
crustáceo
y timón.
La tormenta existe sin que exista el mar
y la sacudan los vientos.
El mar está fuera, los hemisferios locos,
el mundo por la cabeza a dentro.
…………………………………………...
¡Ah! el inconsulto naufragio que no tuvo navíos;
¡mi piloto ha de tener juicio!...


DIALÉCTICA DEL OCIO

mundo proceso,
yo poseso.

continúo y ceso
y mi último acceso
meso.

ahora la lucidez
tiene a su vez
en la locura
pura.

entonces lo que pasa
sobrepasa
una vida sin gracia;

y lo que me queda
apenas complica
una muerte
sin suerte...


SER-CONSUMO

II

las masas
argamasa
de esas plazas.

¿dónde está la gracia
de ese bien que les haga?

es mediodía en las plazas;
todo claro y muy ralo,
la mesa puesta y el comer raro.

cada estómago como fábrica
que sólo digiere pensamientos
y en el cerebro el desmayo,
duro vértigo de esas señales.

y sólo son tuyas
las cosas desnudas
que van en dios.


AMARGAS

II

¿Qué hacer para oírme
si estoy en silencio?

¿Qué hacer para decir
si no pienso ni hablo?

Yo sé que estoy dimitiendo de mí

…………………………………..


y este tedio me conmueve…


AMARGAS

III

Me hago y me deshago
y con tanta fuerza
como si mi morir
me convaleciese.

Y en esa prisa,
menos ansia,
la vida me atraviesa
y pasmo…


ALFA & OMEGA

A la hora cero del primer día de la Creación
el Hombre inventó a Dios,
para adorarse y para adorarlo
a su propia semejanza.

Después se separan
y el instante
en que urdían sus desenlaces
fue llamado Vida.

El cielo fue construido
y Dios pudo en él dormir,
estando silentes las trompetas
y en los pastos sus bestias.

En el Paraíso, la falta de Dios
fue siendo ocupada por el Pecado
que se comparaba a la Virtud.
Y el Hombre comprendía
que el destino de la madera
sólo depende del artesano
y que sin la manzana
la Pureza no debe ser alabada.

Finalmente, ya sonaba el Apocalipsis
que fuera sembrado
con sus primeros vientos.
E imaginaron sus cuadros
y sus menguantes,
la cabellera de Dios
en las crines de cuatro caballos
y la cabeza del Hombre
en las patas de siete bestias.

Y en verdad dejaron dicho
que el Evangelio
sería apenas memoria
de que creándose la Creación también era
y que los despojos de ese fin
ya se contenían en la víspera de su comienzo.


SER MURIENDO

La amo también, así cadáver,
de ahí que mi canto
fluya como agua-muerta,
con olor de sándalo
y gusto jabonoso.

La quiero en las frías claves
a mi espanto
que mal se comporta
en este escándalo
en que entonces me hallo.

Ya no preciso presentir
el amor y el amar
en cada uno que sumamos
y ni estamos
el uno para el otro.

Ahora sé que sentir
no es ver todo claramente,
ni decir lo que fuimos
o si nosotros somos
uno adentro de otro.


Y no se podrá vetar
la dádiva incondicional,
absoluta y absorta,
sin el exhausto tumulto
que no me traería de vuelta.

Aquí, pues, losa, lápida y mueca,
la amo, vértigo lúcido en el cual
-desierto roto y ruta libre-
en la que nada se oye y escucho
que todavía me abrirá la puerta...



* Todos los poemas pertenecen a Os hemisférios loucos (J. Pessoa, 1972).

Versiones: Demian Paredes, Buenos Aires, 2021.

Figueiredo Agra (1936-1982), poeta, abogado y político. 
Entre sus poemarios se encuentran Guarda esses poemas, Luciene (1965), Vida Flauta (1974) y Café das manhãs amargas (1976).


jueves, 3 de febrero de 2022

Silvia Beatriz Amarante: LA TRILOGÍA DE KORONAVIRUS

 









 














Koronavrus”, de Alejandro Elissagaray, novela publicada por Editorial Dunken, integra una trilogía pensada por el autor como una suerte de intento de ciencia ficción política.     
                                                                                                                                                                            En esta primera entrega, la figura del alienígena Koronavirus se halla dotada de cierta singularidad. El nombre del personaje escrito con la letra k, encarna una ironía que alude  a la figura de la Vicepresidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner, quien hace un pacto fáustico  con este tenebroso ser que proviene de un planeta en extinción y es responsable del virus que acosa a los terrícolas. A partir de allí acaecen una serie  de eventos violentos que terminan con el derrocamiento del gobierno al cual el kirchnerismo pertenece y la gestación de un autogolpe sangriento, con la detención del presidente y la asunción de un poder totalitario, bajo la presidencia de Cristina Kirchner.                                                           .                                                                                                 
La segunda entrega narra la consumación de los objetivos de Koronavirus en el país y en otros que se han aliado a él, todos de signo opuesto a los valores democráticos y republicanos.                                                                                                             
Finalmente, el último libro de la tríada abarcará  la guerra de Koronavirus  con sus ex aliados por considerarse traicionado  y haber sido un mero objeto de éstos,El resultado será apocalíptico, con un planeta Tierra que no será destruido, pero sí dominado por los alienígenas.