Osvaldo Sauma |
Nueva Ars Poética
ya
sin afán ni aspiraciones
sólo
escribo
para
no morirme antes de tiempo
para
liberar al amor y al rencor
del
combate feroz de las vísceras
y
no olvidarme jamás
de
los artífices de la usura
también
para sentir
(de
vez en cuando)
ese
nirvana transitorio
de
toda
creación
furtiva del silencio
CAUTIVO DE SÍ MISMO
un
hombre hace trillo
sobre
el mosaico
cautivo
de sí mismo
va
de un lado al otro
de
la buhardilla
un
hombre
está
a punto de sucumbir
y
su necio deambular
lo
sostiene en vilo
terapia
de los locos
o
los desvelados del reino
en
su afán
de
evitar el descalabro
en
ese ir y venir
rumiando
el
propio escozor de su amargura
LOS
SIGNOS DEL AIRE
las
nubes de estorninos*
dibujan
presagios en el cielo
el
futuro se lee
en
las formas corpóreas
que
proyectan
las
bandadas en su vuelo
¿qué
importa si sus cuitas
arruinan
las ruinas del entorno?
¿qué
importa si los autos o las motos
patinan
entre sus desechos?
ellos
son el vivo oráculo del devenir de Roma
*Sturnus
vulgaris
NOTICIAS ANTIGUAS
acalla tus visiones
hermano
Carlos
lo
peor acaeció ayer
nos
engañaron
Dios
no hiere
por
mano de mujer
ni
elige pueblos
ni
hay religión
que
lo contenga
las
voces del cielo
no
propiciaron la infamia
ni
mal aconsejaron
a
Dalila o a Judith
Esaú
era
la energía incesante
corriendo
jubilosa tras
la
ciega emotividad de la vida
ni
las lentejas de la discordia
ni
la madre alcahueta y mezquina
ni
la pelambre de la bestia
van
a trepanarle las alas
a
estas oscuras señales
Agar
Sigue
abandonada en el desierto
Ismael
cultiva
la flor del rencor
sobre
la arena fértil de su pueblo
y
la avaricia
como ayer
prosigue
adorando el oro del becerro
LA MANO QUE NOS BUSCA
alguien toca una puerta
y toca todas las puertas
del mundo
el silabario de la mano
busca a tientas
demanda el nosotros de los
otros
el vos del yo / el yo del
vos
alguien con los nudillos
agita la noche
con un toc-toc agudo
pregunta por el nombre
que nos nombra
alguien busca a alguien
impulsado por su necesidad
o por la del otro
no es el golpeteo febril
del asesino
ni la patada en la puerta
del gendarme alimentado por
el odio
tampoco es
el llamado lastimero del
mendigo
es
más bien
el galopar de unos dedos
femeninos
sobre el sonido cómplice de
la madera
LA PURIFICACIÓN DEL TEMPLO
me conmueve el pasaje
donde Cristo
látigo en mano
enfurecido
sin control
arreciaba con todo
gritándoles
a los vendedores de palomas
a los cambistas:
Quitad esto de aquí.
No hagáis de la casa de mi Padre
una casa de mercado*
y qué si este planeta errante
es el templo el santuario
la casa del Padre
no se nos haría necesario
látigo
en mano
echar de nuevo a esos viejos mercaderes
ahora reinstalados
entre las alzas y las bajas de Wall Street
*Evangelio según San Juan
2:16.
NINGUNA MUJER ES MEJOR QUE EL MAR
ninguna mujer
es mejor que el mar
y aún así
todos los peces caben en su vientre
toda la historia se resume en su caverna
todos nuestros delirios se aplacan en sus senos
ninguna mujer
es mejor que el mar
y en todas las ensenadas interiores
está escrito su nombre
en todas las galerías del recuerdo
hay una flor de fuego entre la niebla
unos besos que se irán a la tumba con nosotros
ninguna mujer
es mejor que el mar
y el furor de su oleaje
nos lleva a la cima
o nos hunde en el silencio de la muerte
ninguna mujer
es mejor que el mar
y aún así
mi faro no deja de buscarla
entre el nutricio mar de los sargazos
ARREPENTIMIENTO
EN FALSO
pido
perdón
a
todas las mujeres que estuvieron conmigo
sobre
todo
a
las que con otra mujer traicioné
será
que amo más a la mujer que a una mujer
será
que hago acopio de los placeres vividos
como
si el amor fuera memoria
y
no lo que es o debería ser o uno se inventa
yo
qué sé
yo
sólo sé que todo sucedió
por
mandato divino o del azar
o
por insensatez pasión desidia
qué
sé yo
pero así fue
y
cada una de ellas
entre
mis brazos brilló
única
aunque
fuera tan sólo una sola vez
VIEJO NIÑO PADRE MÍO
te
miré tan asustado
tan
niño
Padre
cuando
la muerte
anunció
en tus ojos
su
llegada irrevocable
hubiera
querido decirte
gracias
despedirme
de vos con un abrazo
recordarte
que Dios
te
había desde siempre perdonado
Dios
perdona a todos
los
que apuestan la vida por la vida
e
improvisan
con
el coraje del corazón
la
ruta de la existencia y sus azares
yo
sólo hubiera querido decirte
que
te amo
que
amé tu altivez entre los altivos
tu
humildad entre los humildes
y
ese terco orgullo
forjado
en
la noble arena de los desiertos
II
hubiera
querido llevarte
Padre
frente
a la tumba de tu Padre
hubiera
querido
que
perdonaras en vida
el
abandono que en vida te hizo
el
que yace ahora
abandonado
en Puerto Padre
hubiera
querido que te fueras
sin
ese peso en el costado
que
en la otra orilla
fuera
más ligera tu carga
que
dejaras las heridas de este lado
III
ya
podés irte en paz
viejo niño padre mío*
ya
los nietos hablan de vos
como
si no te hubieras ido
como
si fueras una presencia
perpetua
en nuestras vidas
no
temás
no
bien traspasés el túnel de la luz
las
Huríes te devolverán el corazón de niño
jugarás
de nuevo entre el sol de los muertos
y
le daré a mi Padre
el
abrazo que en su muerte no pude darle
a
mi Padre que yace ahora
abandonado
en Puerto Padre
*Jaime Sabines.
GUERRA AVISADA
Amor
de qué te sirve un poeta
él sólo tiene palabras
soledad y palabras
una frase amable
y muchas ilusiones de papel
de qué te sirve un hombre
que desconoce los límites
que edifica una muralla de
sombras
donde guarecer los destellos
de su sueño
el poeta sabe poco de alegrías
es más un traficante del
infortunio
un ave agorera en territorios
desolados
él comercia con los ciegos
estrellas distantes
vende a los sonámbulos sueños
de ímpetu nocturno
navegaciones a los que padecen
de insomnio
él le lleva flores a los
árboles
aluminas al corazón de los peces
carbunclos a las luciérnagas
él destila nubes bajo el sol
absorto
de verdad
amor
desistí
a él ni Platón lo quiso en su
República
es al primero que acosan por
ser zorro
al primero que apresan por ser
pájaro
al primero que matan por ser
lúcido
y lo que es peor
a él siempre le cobran
recargo en los recibos de la
luz
desdeñalo
él no podrá darte ninguna
seguridad
hace gala de su pobreza
del verde sol de su ocio
y como un niño
en todo cree ver el asombro
te lo advierto
amor
no te
involucrés
él sólo puede ofrecerte
el territorio gris de las vías
libres
EFECTOS COLATERALES
la luna se alza
como un ícono
sobre la noche
afuera los seres
humanos
se matan en las
carreteras
o en los bares
o en las calles
asidas
al tropiezo de
sus obsesiones
otros se protegen
de la soledad
bailan la danza
de las diversiones
se revuelcan en
las camas
para olvidarse de
sí mismos
en el cuerpo del
otro
o se suicidan
bajo la claridad
de los altos
puentes del vacío
sólo los solitarios se ensimisman
en el sinsentido de los días
sin que los rayos lunares
alteren sus marejadas internas
en medio de las
musas extintas
hayan consuelo
a pesar de que no
exista salida
a pesar de los
baños de la luna llena
en su ir y venir
sobre el flujo marino
entre las aguas
interiores de las mujeres
o al fondo de esa
nostalgia de lobos
que los hombres
llevan consigo
los solitarios
viven
del rumor de sus
silencios
y beben / a solas
brindan
con la luna y su
propia sombra
emulando a
Li-tai-Po
en los eternos
rituales del desamparo
LATITUD CERO
Aquel que no ama las nubes
que no vaya al Ecuador
Henri
Michaux
justo en la mitad del mundo
las nubes
perros del aire
viajan directamente al sur
nubes que Michaux amó
como se suele amar a los lobos
esos pastores fieles de las
montañas
en medio de la cintura del
planeta
en el punto cero cero cero
donde convergen el yin y el
yang
hay un hombre dividido
entre una línea imaginaria
y los rayos perpendiculares
que deja caer el sol
aquí
sobre estas cimas
donde la razón trazó sus
coordenadas
y orientó el desasosiego de su
miedo
aquí en el Ecuador
hay un hombre fervoroso
cantándole al ombligo de la Tierra
TARJETA POSTAL
sospecho
de los obeliscos
implantados
en el frontispicio
de
las iglesias romanas
mala
señal para las gaviotas
que
perdieron su mar
entre
las ruinas
y
el esplendor de los Etruscos
pero
yo vine aquí
para
amar a una mujer
no
caminé los caminos
que
conducen a Roma
para
fijarme en nimiedades
vine
porque sus besos
me
protegen del mal de ojo
y
redimen con fuego mis cenizas
EQUIDAD
que nadie se vaya impune de esta fiesta
ni escape nadie por la puerta trasera
como si no fuese artífice de su negligencia
y no olvide la cuota de horror que se merece
ni diga
no sabía/ yo pensaba/ tengo el alma noble
que nadie huya
de esta fiesta de los taladros
con licencia de ángel obeso
que prohíban la venta de bulas papales
que nadie abandone el barco
como las ratas
ni cave túneles como los topos
que no se salve nadie si no nos salvamos todos
MIRÁNDOLA DORMIR
todo hombre es su propio sol
en la media noche del hastío
cuando los grillos chillan
como fuego endemoniado
y las estrellas
están más distantes que nunca
bajo la luz del aguardiente
todo hombre
apaga
la lumbre interior de la nada
mientras mira dormir
a la mujer que le cedió el destino
no la que le inventó la ilusión
todo hombre
que como yo se emborracha
junto a la mujer
que nos huye en sueños
evade la necesidad del otro
hace de su fracaso
un tintineo abstracto
y se bebe en silencio su perdición
A SOLAS EN CASA
no quiero mover un dedo
me abandono
me ensimismo
me fugo del devenir y del progreso
me oculto en los armarios de la infancia
en la cueva del autista
prueba de ello son las colillas
que deja por todas partes el desasosiego
esa ropa colgada en cualquier puerta
los trastos neciamente sucios
no es mentira esta abulia
estoy cansado de mí y de los otros
de los muertos del día
de los impuestos que suben
de los salarios que no alcanzan
de la impunidad que siempre
protege a los políticos
de no ser yo
de no poder vivir como en mis sueños
UNA
MUJER BAILA
una mujer baila
amparada a la noche
despliega sus brazos
como decir sus alas
desde el centro del aire
hacia las afueras del aire
en diagonal a los espacios de la luz
amparada a la noche
despliega sus brazos
como decir sus alas
desde el centro del aire
hacia las afueras del aire
en diagonal a los espacios de la luz
entre los costados de
la sombra
una mujer gira
como un astro
y sobre sí misma
esboza
esboza
la ruta del azar y sus
conjugaciones
gira
gira
baila
alza un tiempo magnético
como quien alza un pájaro
desde la tierra que lo atrapa
y traza con un carbón encendido
el lenguaje bermejo de las cavernas
alza un tiempo magnético
como quien alza un pájaro
desde la tierra que lo atrapa
y traza con un carbón encendido
el lenguaje bermejo de las cavernas
baila
y con ello sacude
los miedos de la infancia
que aterrados todavía
nos llaman desde su adentro
una mujer baila
sobre el corazón de la madera
para enardecer
el latido ciego de la vida
baila sobre mis heridas
para recrudecerme
el camino del remordimiento
una mujer baila
sola contra la
adversidad
baila sobre el planeta errante
sobre un contratiempo de la memoria
y se fuga en esa fuga de la música
y vuelve sobre sí misma
para revelarnos
un deseo desterrado del Paraíso terrenal.
baila sobre el planeta errante
sobre un contratiempo de la memoria
y se fuga en esa fuga de la música
y vuelve sobre sí misma
para revelarnos
un deseo desterrado del Paraíso terrenal.
INTIFADA
este es un poema
que nace de mi rabia
por donde quiera que pasa
arroja las piedras de su cólera
la hiel del insomnio
la resaca de un dolor
encerrado en el pecho solar
nada detiene su feroz cabalgata
como un quinto jinete
levanta el polvo estelar
sobre las mezquindades de la historia
echa fuego por el hocico de los tiempos
deja cenizas de pólvora
entre la ilusión de los verdugos
corre desbocado
espanta las palomas de la discordia
y alfanje en mano
vierte su odio
sobre las cabezas de los dirigidores
este es un poema
arrastrado por ángeles furiosos
las palabras salen de sus bocas secas
como de un manantial de aguas sangrientas
o como lava de volcán si así lo quieren
o bien como un derroche de piedras
sobre las ruinas de una ciudad
hecha de piedras sobre piedras
TRÍPTICO
DE LA BUHARDILLA
a
Francisco Amighetti
In
memoriam
I
derramo
los primeros tragos del aguardiente
para que los ángeles
beban conmigo en soledad
con amigos así
es fácil perder la cordura
nada mejor que beber
amparado a su pulcritud
extraña costumbre esta
a la que a diario me acostumbro
para exorcizar los fantasmas de la tierra
para despertar la embriaguez seráfica
y alzar vuelo en medio de la nada
II
salud
hermano
salud
de más está decir
que cada uno lee en el otro
el cúmulo de sus miserias
de más está decir
que envejecemos
y que de nada nos sirven
las estatuas de sal
que dejamos perdidas en el camino
(el viento a nuestras espaldas
sopla una tramontana inútil)
salud
hermano
salud
por esta soledad que compartimos
frente a frente / espejo contra espejo
III
hoy no llamaré a nadie
hoy quiero emborracharme
a solas con mis ángeles
aquí adentro
no hace falta el mundo
tenemos amigos
que desde las sombras
celebran con nosotros
en silencio
hermanos que releemos
a la manera
en que se lame un animal herido
aquí
ni siquiera
hace falta la música
nos bastan
la palabra y el aguardiente
el humo sagrado
y otras comunes pertenencias
aquí no hace falta nada
aquí hacen nido los pájaros nocturnos
y Homero y Ulises vuelven a quemar las
naves
ASABIS
La segunda ley es la Asabis,
la solidaridad de
la sangre que une entre sí
a los miembros
de un clan,
como si fueran un mismo cuerpo.
G. Virgil
Gheorghiu
No conozco Beirut
ni los cedros de Líbano
no conocí a mi abuelo
ni a su padre el viejo Sheik
no sé ni una palabra en árabe
tampoco si provengo
de los Sunnitas o de los Chiítas
si fui fenicio navegante
en aguas del Mediterráneo
o si en otro tiempo cabalgué sobre Balbek
entre las tropas de Saladino el Grande
nací próximo a la línea Ecuatorial
a 10˚ latitud norte media
y 84˚ longitud oeste media
del meridiano de Greenwich
y ya sé que no hay patria para mí
más que esta patria donde viven mis hijos
sin embargo
poseo una chilaba que cambié
a Mohamed en una calle de Tetuán
y bajo el influjo de esa vestimenta
me supe árabe ente los árabes
y antes de caer deslumbrado
frente a la belleza de la Alhambra
comprendí que preexistían
sus prodigios ornamentales
sus arabescos
y cuando por primera vez
supe de Gibrán Jalil Gibrán
recordé la historia que subyace
dentro del hilo común de nuestro Asabis.
Osvaldo Sauma (Costa Rica, 1949).Poeta. Profesor del Taller de Expresión Literaria en
el Conservatorio Castella, San José, Costa Rica desde 1981 a 2010. Autor
de: Las huellas del desencanto
(1983), Retrato en familia (Premio
Latinoamericano EDUCA, 1985), Asabis
(1993), Madre nuestra fértil tierra
(1997), Bitácora del iluso (2000), El libro del adiós (2006). Antologías
realizadas: Poesía Infantil del
Conservatorio Castella (1986), Antología
del Conservatorio Castella (1990), Los
signos vigilantes (antología de poesía ecológica, 1992), Tierra de nadie (9 poetas
latinoamericanos, 1994), La sangre
iluminada (6 poetas latinoamericanos, 1998), Martes de poesía en el Cuartel de la Boca del Monte (1998), Antología de seis poetas latinoamericanos (2006).
Coordinador
de la rama de literatura en el Festival Internacional de las Artes de Costa
Rica en los años 1994, 1998, 1999, 2005, 2006 y 2009, dando a conocer al
público de Costa Rica a poetas como Juan Gelman, Gonzalo Rojas, Blanca Varela,
Jaime Sabines, José Emilio Pacheco, Pablo Armando Fernández, Claribel Alegría,
Piedad Bonett, Rocío Silva Santiesteban, Juan Manuel Roca y William Ospina,
entre otros.
Ha
sido jurado en los premios internacionales Ricardo Miró, rama de poesía (Panamá
2000), primer premio hispanoamericano de poesía Sor Juana Inés de la Cruz (México 1997) y Juan
Ramón Molina (Honduras 1983), entre otros.
Su obra ha sido traducida al inglés, al francés, al portugués, al árabe
y al hindi.
Ha participado a numerosos festivales internacionales de poesía, como:
Medellín y Bogotá (Colombia), Granada (Nicaragua), Rosario (Argentina), Festival
Mundial de la Poesía
(Chile), Mundo Latino (México), Festival Internacional de las Letras Jaime
Sabines (México), Festival Intercontinentale della Poesia Mediterranea (Roma,
Italia), Kritya, Mysore (India), entre otros.