César Fernández Moreno |
a Raúl Alfonsín
. .. en cuanto a vos patria…
che
patria que volás entre cielo y tierra como
pájaro entre sus dos alas
yo te
voy a decir lo que necesitás
necesitás muchos hijos insolentes calaveras
generaciones de
hijos desalmados
que te quieran que te odien furiosamente
que te tomen como una curva cerradísima
que te tomen como una copa de cicuta
que te tomen la mano la cintura
yo pongo sobre vos y nada más que sobre vos
todo mi cuerpo
a
esta luz me dieron a esta luz me doy
y bueno soy argentino
Argentino Hasta la Muerte, 1954
me dan a luz
me dan a luz me inician en el uso de la luz en
noviembre
de 1919
la revolución de octubre pero no de un mes antes
sino de
octubre de 1917 era mi hermanita menor
ella había cumplido dos años uno de guerra uno
de paz
pero yo ni siquiera alcancé a enterarme de sus
hazañas y
miserias
es que cuando yo nacía mi tío César
ya no podía vender más caballos para la gran
guerra
yo había nacido en el año de nuestra semana
trágica
allí empezaba la represión de los metalúrgicos
por los
militares (cfr)
pero yo recién nacido no alcancé a darme cuenta
ni entonces ni mucho tiempo después
tácitamente
yo me conformaba
con la teoría económica que mi padre exponía en
verso
ese mismo año
“en la República Argentina
un hombre gana mil pesos
con unas cuantas ovejas
entre las calles de un pueblo” (cfr)
es cierto todavía quedaban unos añitos de
prosperidad
el peso argentino iba del brazo de la
libra esterlina
la Casa era todavía verdaderamente Rosada
Yrigoyen Alvear y después Yrigoyen viejito ya
“en este país —él decía— el que habla se jode”
pero en 1930 su cueva ya no le sirvió más
desde entonces durante medio siglo
nuestro país devino
el campo deportivo de las fuerzas
armadas
“cuando empezó mi desarrollo se acabó el
del país”
era la década del 30 yo me iba iniciando
como podía
en el colegio nacional más multicultural
de Buenos Aires
yo fundía en la misma amistad a los
gallegos con los judíos
con los italianos
aprendía los descubrimientos de los dos
célebres tanos
Galileo de Pisa y Tuñín de la
Boca
y mientras tanto Mussolini fundía balas
para fundir a Etiopía
Hitler fundía en los hornos a los judíos
y entre nosotros el fraude perpetuaba a
los duelos
de la pampa húmeda y de la bolsa
empapada
los panamericanos es decir los
norteamericanos
entraban en Nicaragua (cfr)
y los franquista ay entraban en Madrid
así flotaba mi insensible adolescencia a lo
largo
de la década infame
hasta que un día cumplí dieciocho años
y yo era todavía un niño que rememoraba
su propia infancia
en acertados tercetos
y mientras tanto Antonio Machado moría en
el hotelito violeta
de Collioure
junto
al cementerio para que nadie se molestara mucho
cuando lo llevaran a
enterrar
casi una revolución
cuando llegaron aquí los
españoles el campo era
lo más importante
claro no había otra cosa
ahora sigue siendo lo
único importante o por lo menos
lo único firme
claro el campo no puede
moverse física ni mentalmente
¿conoce usted algún
estanciero comunista?
y el que no tiene tierra
pierde pie manotea como ahogado
el derecho sigue los
meandros de la maldad del hombre
sea para evitarla sea
para castigarla
a veces ay para
protegerla
y como aquí nadie paga a
nadie
los abogados siempre
pueden cobrar en nombre del acreedor
así que yo me dije
tierra ya no me queda
y bueno soy abogado
gracias a tan noble
profesión
hice fortuna pude
comprarme un Fiat Topolino
la segunda guerra
mundial estaba por terminar
tantos hombres cayeron
en esos años
yo sólo había caído en
el matrimonio
cuando me levanté me
encontré padre
yo seguía soñando que
era un personaje de Hemingway
o de Fitzgerald
y en una de esas los
argentinos casi se agarraron a cachetazos
Perón casi les regalo una
revolución
ejerció una presidencia
y casi otra
sus invocaciones a la
patria eran tan repetidas y hueras
que yo fui llevado a
formularlas al revés y me declaré
“argentino hasta la muerte”
un año antes que el
dictador se transformara en el dictador depuesto
yo no podía imaginarme
que su casi revolución
iba a ser largamente reprimida como si hubiera sido
realmente una revolución
y que pasados treinta
años
el mismo Perón iba a
reprimirla más que nadie
él no quería que su
revolución
dejara de ser casi
las prohibiciones
el comunismo está
prohibido
de qué otra manera
podría ser
el peronismo está
prohibido
quizá podría ser de otra
manera
agárrese ahora el
radicalismo está prohibido
es demasiado radical hay
que erradicarlo
tres golpes de estado
tres
flor de percusionistas
al viejo Yrigoyen lo
bajaron por viejo
al intransigente
Frondizi por transigente
a Illia porque nadie
sabía si era Illia o Illía
sin embargo al principio
no te echaban a tiros
te iban quitando espacio
de buenos modos
vos empezabas algo y
nadie te decía nada
pero este es el país que
parece y no es
parece rico pero la
sequía
parece seco pero las
inundaciones
parece culto pero mejor
no
vos ibas caminando por
lo tuyo
todo parecía que sí
y al ratito nomás
aparecía el límite
sí pero no
todo lo que se te
ocurría estaba siempre cerca del límite
no era necesario tener
una conciencia política
moverse con cierta
soltura era ya demasiado alarmante
tan inminente como la
prohibición
pero de costado aparecía
el soborno
mirá nene lo que te
damos si te portás bien
tenías que ser como
todos o no ser como ninguno
de este principio
saldrían después los asesinatos
un muerto no es verdaderamente
como ningún vivo
así te iban pechando
hacia afuera o abajo
con pequeños ademanes
apenas te dabas cuenta
de pronto te encontrabas
sin poder hacer nada
estaqueado entre la
prohibición y el soborno
en cuanto a mí para
volver a mi marginal historia
el mismo día que
derribaron por puro gusto a don Arturo
ese mismo día yo resolví
probar otra luz
que no era la luz a la
que me habrán dado a la que yo me daba
para qué lo hice
fue el primer ir de algo
que luego se transformaría en ir y venir
y luego en irse
después fue apareciendo
otro país donde yo ya no estaba
una generación dispuesta
a matar y a morir
acaso la de esos hijos
calaveras de que yo había hablado
y después sin más
vueltas
aparecerían
las calaveras de los
desaparecidos
el des-inmigrante
él estaba de novio con
la patria hacía proyectos para casarse
y ahora sólo le queda el
pasado de su abuelo inmigrante
y el de su hijo que
crecerá en otro país en otra lengua
para el que se fue se
acabó el presente
se fue de la patria
salió de la historia
a mí me engañaron
siempre
decía el argentino
fugitivo
me prometieron la
Argentina de Vértiz
me dieron la de
Sobremonte
me prometieron la de
Mariano Moreno
me dieron la de Cornelio
Saavedra
me prometieron la de San
Martín
me dieron la de
Pueyrredón (cfr)
me prometieron Rosas
me dieron Urquiza
me prometieron Yrigoyen
me dieron Uriburu
me prometieron Perón me
dieron Aramburu
me prometieron Frondizi
me dieron Onganía
otra vez Perón pero qué
cosa
y me dieron Videla
así que ya no creo en
más promesas
para eso me vuelvo a
España qué carajo
mi abuelo se equivocó
no tenía para qué haber
abandonado su aldea en Santander
qué tanta ropería al por
mayor
qué tanta patria
desconocida
cuántas travesías del
Atlántico se hubiera ahorrado la familia
cuántas mudanzas
derrumbándose
tantas vueltas para
volver a lo mismo
y bueno soy español
querencias
fue así hermano Raúl
como llegué a creer que la patria
estaba perdida para siempre
justo lo que vos no
creíste nunca
y yo andaba buscándola y
buscándola
cambiando querencia y
querencia
primero España desde
luego
luego América latina
donde de todos modos seguía metida la Argentina
Venezuela México y más
que nada Cuba
y en Francia al
principio y al final de esta peregrinación
a lo largo de una patria
ausente para mí por diecisiete años
a la final todos los
hombres del mundo tienen algo de argentinos
en un principio yo
buscaba y a la vez rechazaba
aquellas querencias de reemplazo
procuraba disminuirlas
para así aumentar la patria ausente
hoy sigo amándolas
soñándolas generosas maternales
cada una de ellas me
sedujo a su manera
ofreció su techo tan
protector como el de casa
dio sus frutos con sus
nombres nuevos que pronto se me hacían cotidianos
amistades amores el sol
la noche diferentes estrellas
y debo decirte che viejo
Vizcacha
que no siempre se me
atrasó la parición
más de una vez se me
adelantó
algunas profesiones
para los estancieros no
había problema
todavía imitadores de
los ingleses
cuando no de los conquistadores
españoles
en el mejor de los casos
paternalistas pero a la vez castigadores
de sus peones
explotadores de la
hidalguía la elegancia el valor de los campesinos
indiferentes a todo lo
que no sea vacas en el número suficiente
para iluminar su árbol
para permitir el viaje a Europa
rústicos que aprendieron
algunas mafias francesas
la cultura es para ellos
una flor en el ojal
del saco azul a rayas
para el Jockey Club
tampoco había problemas
para los jóvenes ejecutivos
jóvenes intelectuales o
estancieros fácilmente transmutados en ejecutivos
ya orientada hacia el
norte su admiración sumisa por los sajones
aventureros de sus
boîtes y sus entregadas secretarias
automovilistas cuya
audacia
llega hasta frenar con
gran ruido de gomas frente a la Biela Fundida
para algunos
intelectuales no había problema
quiero decir el tipo
medio del intelectual argentino
ese que mide su gloria
por el cuerpo en que La
Nación le titula su soneto hebdomadario
el que recita para los
ricos gustadores de la belleza del Circulo de Armas
el que sigue escribiendo
sobre las ruinas de Pompeya
sin pensar para nada en
las casas baratas de Nueva Pompeya
pero también surgía una
nueva generación entre las explosiones
y los escombros
así es nuestra patria
cuanto más atrás le cortan el pasto de sus potreros
más crece el pasto y
hasta florcitas
en cuanto a los
comandantes que vinieron a perfeccionar
la insuficiente represión
desatada
por los herederos de Perón
eso comandantes sabían
muy bien qué clase de Argentina querían
una Argentina agresiva
entonces primero ellos mismos
agropecuaria entonces
primero los estancieros
importadora entonces
primero los ejecutivos
financiera entonces
primero los banqueros
abajo quedaban todos los
demás argentinos divididos sólo en dos grupos
los mansos
a quienes se les
permitiría vivir y morir en la
impotencia
y los que no eran mansos
los subversivos
incluyendo a los que no
lo eran pero así llamados para simplificar
para todos ellos el
secuestro la tortura la muerte
o por lo menos el exilio
envejecer de golpe
o morir
pero el pueblo pensó
pero detrás y debajo de
todos
detrás y debajo de los
intelectuales los abogados los estancieros
los ejecutivos los comandantes
detrás y debajo de todos
estaba el pueblo
el pueblo adelante y
arriba de todos
el pueblo acostado que
no pensaba más que vertical
ese pueblo pensó y salvó a todos
“aquí lo mejor que
tenemos es el pueblo”
tuvo razón Perón esta
vez en su contra
el pueblo conversador
valiente irónico cordial
él te explica bien por
qué te perdiste te acompaña hasta la esquina
para mostrarte el buen camino
y el pueblo no votó por
fantasmas ni por aparecidos
prefirió consultar a un
joven abogado de Chascomús
que recitaba el
preámbulo de un librito olvidado
y entonces
llegó el doctorcito y
mandó a parar
sólo entonces volví a
darme cuenta
que yo como todos los
que nacimos y nos criamos en esta patria
estoy sentenciado sin
apelación a ser argentino
hasta la muerte como
dijo Guido y Spano
yo me copié de él pero
él se había copiado de la realidad
así que no te hagas más
el loco muchacho
zapatero a tus zapatos
esta es tu tierra este
tu cielo estos tus hermanos caiga quien caiga
se te cortó el sueño del
pibe
no sos universal ni
europeo ni latinoamericano
ni siquiera rioplatense
acaso ni siquiera
argentino
sólo porteño
nada de lo que vos digas
o hagas tiene sentido sino para otro porteño
y con suerte para otro
argentino
volvé a tu punto de
partida
allí podrás hacer todo
lo que pensabas hacer en la vejez
y si no volvés no habrá
para vos ningún punto de llegada
ni siquiera la muerte
muchacho
pero en cambio si volvés
vas a morir como un
señor
el último viaje
y entonces resolví
volver a Buenos Aires
otra vez destino Buenos
Aires
“no se puede con este
nombre feliz” (cfr)
tenía razón la vieja
etiqueta de mi valija
y allí me encontré como
todos
un país todavía cortado
a la medida de los comandantes
cuarteles muy bien
terminados
autopistas sin terminar
derrotadas por el pastito
hoteles internacionales
donde no alcanza la plata ni para pagar
la propina del portero
las casas crecidas
caóticamente como los yuyos en un baldío
los frentes de la planta
baja decorados para seducirte
los nombres de los
comercios llevan apóstrofes y vocales
que nadie sabe traducir
Gaucho’s O’Pizza Mc González
las muchachas llevan
sobre los senos frases en inglés
que ellas tampoco saben traducir
la publicidad insiste en
que te conviene ser joven y rico
y una generación de
chicas periodistas
ha surgido sedienta de
verdad
dios te libre que caigan
sobre vos
el servicio doméstico
sirve a los señores como para evitarles
todo sufrimiento
el subempleo propone sus
lustradores perfeccionistas
sus deportivos y
señoriales porteros del barrio norte
su escuela filosófica de
los peluqueros rivalizando
con los peripatéticos mozos de
café
sus empleados de vender
cospeles porque las monedas
no se pueden usar como fichas
qué esperanza ellas
ruedan a la velocidad rutilante de la inflación
y son suplidas por
papelitos marrones que se van despedazando
de mano en mano
salvo en las manos de
los colectiveros que los clasifican
y archivan como bibliotecarios
“el corralón seguro ya
opinaba”… Alfonsín
y ahora Borges opina
todos los días sobre política
mientras los poetas
grandes o agrandados
acceden dejar resbalar
sobre las páginas impermeables
de ciertos suplementos
literarios
algunas confidencias
sobre los matices de su trascendental inspiración
los novelistas andan
mejor ellos son
o bien “tel quel” el
“noveau roman”
o bien revienten en tu
cara un riñon medio crudo
otros en fin baten mejor
el gancia y el campari
por su parte el lenguaje
popular
indiferente a todo eso
sigue inventando giros y
girando palabras
dejando atrás a algunos
escritores ausentes
que todavía insisten con
el apollidado lunfardo de los años 40
¿no es cierto pibe?
quiero decir flaco gordo loco negro tío papá…
los
colectiveros y el dulce leche
un hombre-percha bajo el
calor pasea su saco colgado en el pulgar
detrás del hombro
no vayan a pensar que él
no es un hombre-percha,
sino un descamisado
otro canoso y alto con
algo de barriga otro un arquetipo nacional
hace equilibrio en el
colectivo con sus mocasines claros sin medias
por suerte el colectivo
está equipado de agarraderas y pasamanos
como el cuarto de un inválido
no otra cosa somos los
pasajeros de un colectivo
entre el humo y el ruido
de los escapes libres
la libertad de los
escapes
la única que no nos
faltó nunca
ya ven el colectivo una
de las más bellas creaciones
de la cultura nacional
aparece inevitablemente
de tanto en tanto en esto que yo insisto
en llamar poema
digan lo que digan los
que sólo viajan en auto particular
mientras tanto escuchá
en los restaurants
los alaridos de la tribu devoradora de bifes de chorizo
a veces ay reducidos a
minibifes
cuando no masticados en
un semipiso
lo más chic es usar
sacarina en vez de azúcar
la tribu ha aprendido a
comer mirando algo más que la papa frita
paisajes árboles aunque
sea cortinas de colores
por lo menos en los
lujosos restaurants con nombres extranjeros
que vienen a ser las
tumbas del lado de acá de la Recoleta
¿usted qué opina de la
antropofagia?
¿creía usted que
torturando y matando intelectuales
adquiriría sus virtudes?
los hechos demuestran lo
contrario
y gracias a dios el
dulce de leche
se desparrama sobre
todos nosotros como una fatalidad
la luz que nos dieron
y pensar che Raúl que me
hubiera bastado
tocar tu timbre
atravesar tu zaguán de Chascomús
para juntar naturalmente
la realidad con mis famosos papeles
así que cómo no ponerme
ahora al lado tuyo
al lado es decir donde
estábamos cuando éramos pibes
cuando vos estudiabas la
constitución al lado mío
“ahora que Chascomús
duerme su siesta”
ya sé que tu trabajo no
será fácil
que será difícil casi
imposible
como yo pensaba antes de
que vos me demostraras lo contrario
pensar dejar que otros
piensen
calmar el hambre de pan
fresco y sentencias justas
limpiar el enchastrado
patio internacional del país
demoler las medianeras
que ahogan nuestra América
pero vos como buen hijo
de Chascomús sos barrero viejo
sabés bien que la huella
es la huella
no te vas a quedar si
una costalada te manda a la cuneta
Chascomús “agua muy
salada” en araucano
agua buena para las
heridas
otra vez los libres del
sur
pero tan federales como
las estrellas federales
Chascomús rico pero no
tanto
hay que calcular bien la
lluvia la parición de los pejerreyes
y el país también es
rico pero no tanto
y entonces al país le
viene bien volverse un poco Chascomús
así que basta ya de
siesta para todos
que todos vengan a leer
con vos aquel librito de la juventud
que los tres poderes
funcionen sin pararse
como los tres corazones de un mismo cuerpo
que las provincias otra
vez unidas
aprendan otra vez a
compartir el mapa
porque la patria era si
ese espacio
esa bailarina con un
brazo en alto (cfr)
y también era un abismo
de tiempo amenazado siempre por el vacío
lleno de sangre de tanto
en tanto
y ahora empezamos
duramente de nuevo
para ver si podemos
llenar ese vacío de otra
cosa
que no sea la sangre
derramada
a esta luz nos dieron
nuestras madres
a esta luz nos dimos
a esta luz velada tantos
años por el último golpe de sangre
pero que hoy nos alumbra
como el primer día
y esa luz ¿qué nos pide?
sólo que sepamos abrir
los ojos para verla
de una vez y sin más
tardar
César Fernández Moreno (Buenos Aires, 1919- París, 1985)